Sobre el papel, el circuito de Abu Dabi no ofrece novedades respecto a los últimos visitados por el Mundial. Red Bull parte como favorito y Ferrari y McLaren estarán igual de cerca o de lejos, es decir, entre tres o cuatro décimas por vuelta. Alonso se jugará el título en inferioridad de condiciones respecto a Webber y Vettel y los detalles, los fallos de equipo o alguna genialidad de piloto puede decidir un Mundial que no está hecho ni fácil para Fernando.
Un ingeniero de un equipo de la parrilla consultado por MARCA realiza un análisis exhaustivo de los factores que pueden marcar la última carrera. El primero es el tipo de pista. "De los últimos trazados, en pista seca, fue el de Corea en el que Ferrari estuvo más cerca de Red Bull. Estaba a unas tres décimas. A Red Bull le benefician los trazados donde hay más carga aerodinámica y en ese sentido, Abu Dabi es de carga media-alta, con lo que vuelve a ser un terreno favorable para ellos. La distancia debe ser muy similar a la que hemos visto en Interlagos, unas tres décimas", afirma.
Pese a lo que se pueda pensar, Singapur, donde Alonso realizó la pole y ganó, no era el trazado más favorable a Ferrari. "Estaban a cuatro décimas, pero Vettel cometió un error en la calificación y luego en carrera y en esa pista el adelantamiento es casi imposible. Si sucediera lo mismo en Abu Dhabi, a Fernando no le sería tan fácil mantener la posición. Hay lugares donde pasar", afirma.
Nuestro ingeniero reseña que "no es un buen sitio para jugarse el Mundial. Pero salvo un par de trazados en todo el año -Alemania y Monza- todos han sido malos sitios para los rivales de Red Bull. Ferrari debe jugar la misma baza que hasta ahora, la fiabilidad, no cometer errores. En la calificación, sobre el papel, hay poco que hacer. Red Bull es el más rápido de calle".
Los motores, de los que tanto se ha hablado en las últimas semanas por la escasez de unidades para el coche de Alonso, no son determinantes, a su juicio: "Japón fue el último circuito de motor. Aquí como en Interlagos, no se fuerza el motor, pues Abu Dhabi sólo tiene una recta larga y una semirrecta en ligera curva".
Mucho calor
Lo que no está tan claro es la influencia de la temperatura y el asfalto en el desgaste de los neumáticos: "El año pasado era muy abrasivo y se alcanzaron temperaturas de unos 50 grados. Depende mucho de cómo reaccione cada coche y de la habilidad de cada equipo en los reglajes. El Ferrari es quien mejor conserva, pero a veces el desgaste tampoco influye, pues se cambian las gomas antes de que lleguen a su fin por la estrategia, simplemente cuando empiezan a decaer. Aquí podría haber sorpresas".
Nuestro analista particular dibuja un planteamiendo global de la carrera: "Cuanto peor clasificado, más agresividad. Hamilton tiene que ganar y si se estrella no pierde nada. Él será el que más arriesgue. Luego, los Red Bull tienen que tomar sus riesgos y Alonso debe ser el menos agresivo. Estar tercero, controlar a sus rivales y mirar la calculadora".
Se podría pensar que, con estos elementos, Webber debería ser campeón con facilidad, si Vettel le cede el sitio. "Es lo lógico, pero con el coche que tiene debería haberse proclamado campeón en la carrera 10 y no lo ha hecho. Red Bull y sus pilotos han tenido muchos errores este año y podrían volver a repetirse. Una cosa es tener el coche más rápido y otra, concretarlo. Las prestaciones reales de cada monoplaza no se están plasmando. Ferrari y Alonso han cometido muy pocos errores y ése puede ser el camino que les lleve al título", concluye.
